
La última novela de la escritora nigeriana Oyinkan Braithwaite, El bebé es mío (Alpha Decay), empieza como en una especie sueño. El protagonista, Bambi, se despierta con una conversación de WhatsApp en la cara: su pareja sostiene frente a sus ojos la prueba de que le ha sido infiel. Braithwaite no nos da tiempo para acomodarnos. Bambi tiene que irse de casa inmediatamente y hacerlo en una situación muy particular: en mitad del confinamiento por la COVID-19. A partir de aquí, la escritora no quitará el pie del acelerador ni un solo instante y, apenas unas páginas después, Bambi se encuentra viviendo junto a dos mujeres y un bebé llamado Remi, que se convertirá en el eje del relato.

















